Una startup arranca siempre de una idea con la que podemos resolver una necesidad detectada, o mejorar las soluciones ya existentes en el mercado. Esa idea puede nacer de una persona o de un grupo de personas. De hecho, a veces se dice: “Las únicas personas imprescindibles para una startup son las que tienen la idea”
En un primer momento esta afirmación es una realidad, pero, a medida que se va desarrollando la idea, tendremos que rodearnos de un equipo multidisciplinar que nos permita llevar a buen término nuestro proyecto empresarial.
¿Cómo formar un verdadero equipo de trabajo que lance tu proyecto? Te damos algunos consejos.
El éxito está en la complementariedad
¡Qué aburrido y poco productivo es que todas las personas de un equipo piensen igual y hagan las mismas cosas! Una visión uniforme de un proyecto no nos permitirá tener nuevas ideas, suma de un conjunto de versiones distintas.
Elige a personas con distintos backgrounds, con distinto nivel de experiencia (seniors, juniors) y por supuesto, distintas habilidades y podrás comprobar cómo surgen grandes oportunidades de crecimiento en el equipo.
Asegúrate de tener cubiertas estas tres áreas en tu startup
Negocio
Son aquellas personas que conocen el mercado, el sector al que pertenece tu compañía y que han de aportar el impulso comercial a la misma. El CEO suele ser una figura bastante posicionada en este área, pero el CMO también ha de tener un rol muy activo en este aspecto.
Gestión
Toda startup necesita personas ocupándose de la gestión de la empresa: finanzas, legal, gestión laboral… La figura del CFO o COO, suele ser la que lidera estos aspectos.
Producto/Servicio
Por supuesto, necesitamos especialistas para el desarrollo de nuestro producto o servicio. Son aquellas personas con el conocimiento y las habilidades necesarias para tangibilizar la idea de negocio e ir implementando las mejoras a medida que vayamos testeando nuestra solución en el mercado.
Equipo autónomo y autorganizado
De nada sirve crear una estructura organizacional de tipo vertical en la que todo el equipo tenga que esperar la asignación de tareas y la confirmación por parte de un supervisor. No es ágil y, si por algo se caracterizan las startups, es por su agilidad.
Los equipos startuperos han de tener claros sus objetivos y capacidad de organizar su trabajo de manera autónoma. Ten esto claro a la hora de seleccionar a las personas que te acompañarán en tu camino emprendedor (o ruta del emprendimiento, como decimos en EOF.)
Conoce a los equipos que han confiado en Extremadura Open Future para ser aceleradas en nuestro espacio de crowdworking.
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